Se acaban de realizar las elecciones para presidente en el país más pequeño de Sudamérica, Tabaré Vásquez y Luis Lacalle Pou fueron los candidatos que pasaron a la segunda vuelta en Uruguay. Tabaré quien busca por segunda vez ser el máximo dirigente de los charrúas perteneciente al Frente Amplio, mismo partido del actual mandatario Pepe Mújica, saco un 47.14 de los votos aventajando por 17 puntos al candidato de centroderecha del partido nacional.
En Uruguay el periodo presidencial es de 5 años, y está prohibida la reelección inmediata, Pepe Mujica quien asumió el cargo en marzo del 2010, debe decir adiós a su mandato, el presidente que logro que Uruguay fuera reconocida por The Economist como país del año en 2013, con una amplia popularidad entre sus coterráneos da un ejemplo de respeto a las leyes y a la democracia.
A diferencia de sus colegas en Sudamérica Pepe Mujica no intento modificar la constitución para seguir en el cargo, países como Colombia vieron como Álvaro Uribe Vélez aprovechándose de su popularidad cambiaba un artículo para seguir en el poder, luego como Juan Manuel Santos siguió el camino y se hizo reelegir, aunque desde su segundo mandato impulsa una reforma que acabe con esa posibilidad para los próximos mandatarios, se beneficio de la norma y luego la descarta.
En Bolivia Evo Morales ejerce el poder desde el 2006, y acaba de ser reelegido para un nuevo periodo presidencial, ya son 8 años en el poder y seguirá por ahora hasta el 2020, en Venezuela Hugo Chávez también se perpetuo en el poder con cambios de las reglas, asumió la presidencia en 1999 y terminó su periodo en 2013 año en que falleció.
Ecuador también mantiene su presidente Rafael Correa desde el 2006, y acaba de ser reelecto para su tercer periodo que culminará en 2017, claro que desde el poder presidencial ya se busca la reelección perpetua, para que Correa sea candidato en 2017.
El poder se convierte en el bien más preciado para los Presidentes Latinoamericanos, perder una elección desde el poder es muy difícil, y eso lo ha demostrado casos como el de Cristina Fernández, Dilma Russef y Juan Manuel Santos, que a pesar de ser cuestionados y tener elecciones reñidas, se han mantenido en su cargo.
Mujica duró 13 años en la cárcel, perteneció al grupo guerrillero los Tupamaros, fue elegido diputado en 1994, en 1999 es senador, luego bajo el mandato de Tabaré Vásquez fue ministro de la ganadería, hasta que llego a la Presidencia en el 2009.
Su estilo presidencial austero ha logrado que su popularidad sea notoria, no solo en Uruguay, si no en el extranjero donde se ha convertido en un ejemplo para la ciudadanía de cómo se debe comportar un líder. Aunque ha tomado medidas que han generado polémica en el país oriental como la legalización de la marihuana, el aborto, y el matrimonio gay.
Abiertamente Mújica se ha declarado en contra de la reelección, pues opina que el Presidente es un funcionario público, por tal motivo debe ser sustituido.
Esta comprobado que las reelecciones en nuestros países, generan corrupción en el sistema.
José Mújica el presidente más pobre del mundo como lo catalogaron varios medios internacionales, nos ha dado lecciones de humildad, siguió viviendo en su casa donde lleva más de 30 años, pero la decisión de no reelegirse es de las mejores acciones que ha tomado el PEPE, demostrando que los países no necesitan caudillos que con la excusa de beneficiar a su pueblo, se atornillan a la silla presidencial.
La edad y su vida lo ha convertido en una persona sabia que en cada entrevista deja una enseñanza, cierro esté escrito con un fragmento de su discurso ante la ONU en el 2013.
Hemos sacrificado los viejos dioses inmateriales, y ocupamos el templo con el Dios Mercado. Él nos organiza la economía, la Política, los hábitos, la vida y hasta nos financia en cuotas y tarjetas, la apariencia de felicidad. Parecería que hemos nacido sólo para consumir y consumir y cuando no podemos cargamos con la frustración, la pobreza y la autoexclusión.
Definitivamente una oportunidad para reflexionar.
