Por: JAVIER PORTO L.
Mesa de Fritos-Cartagena
Hoy la ciudad de Cartagena de Indias, el Corralito de Piedras que llamaba el poeta, pintor e industrial Daniel Lemaitre, se encuentra en una gran encrucijada. Ello obedece a que las últimas administraciones distritales y la actual, más que cualquiera, tienen empeñado el futuro de la ciudad en contubernio con los Honorables Concejales, quienes solo saben meterle la mano al erario público. Pues han autorizado 250 mil millones para obras sin interventoria, así como la contratación a nuestros queridos hermanos barranquilleros por 150 mil millones para terminar el famoso proyecto de Transcaribe que lleva más de 13 años. En esta obra se han enriquecido varias casas políticas, y el elefante blanco se encuentra a la vista de todo el mundo.
Ahora quieren entregar por concesión la avenida Bicentenario por la zona costera del barrio Bocagrande y el Laguito, por valor de más de un billón de pesos con peajes incluido para que los ciudadanos paguemos todos. En cambio, se oculta discretamente la exoneración y el no pago de impuesto predial e industria y comercio a más de 12 proyectos hoteleros por más de 20 años. Por eso, hay más de 23 candidatos aspirando a sentarse en el solio de la Plaza de la Aduana y 4 de ellos ex Concejales Distritales. Por ello, los ciudadanos comunes y corrientes se preguntan con que caras salen a proponer sus nombres.
Hay feria en la ciudad para chuparse los impuestos, así como para prorrogar las concesiones en el Transito Distrital, Alumbrado Público y las Basuras. La prórroga de la concesión de ACUACAR, la empresa que maneja el Agua y Alcantarillado, fue 14 años más, cuando aún le faltaban por vencerse 6 años. Todo ello se ha hecho amparados en artilugios jurídicos, para que la corrupción se enseñoree en los despachos distritales.
El ciudadano tiene que tener una verdadera lupa para analizar las hojas de vida de los candidatos, y para no equivocarnos con una mala decisión electoral como diría el embolador de más de 20 años en el “palito de caucho” “A donde va a llegar el barrilete o cometa de robo de la ciudad. Porque los politiqueros”, no dejan ni “para el betún para la pulida”, Solo esperamos que el trámite en el Congreso Nacional de la tan cacareada reforma a la justicia se haga lo más pronto y justo posible. Porque estamos llegando a bordear las fronteras de un chavismo disfrazado con ribetes aparentemente democráticos. Alerta conciudadanos.