Horacio Serpa
Miles de personas militan en diferentes partidos políticos, o en ninguno, sin que nunca se hayan puesto en la tarea de identificar auténticamente sus creencias ideológicas o los programas políticos y gubernamentales con los cuales se consideran representados. Pasa con mucha gente. El Partido Liberal se propuso llamar la atención de la ciudadanía sobre estos aspectos para que cada quien logre ubicarse políticamente donde le corresponde. Desde luego el ejercicio se ha venido practicando con éxito para reconocer a los auténticos liberales.
Las opciones son múltiples porque tienen que ver con la gente, con el Estado, con la sociedad, con el bienestar, con lo internacional, con la historia, en fin. Si, por ejemplo, consideras que ya es hora de poner término a la guerra para que tengamos convivencia y tranquilidad, eres liberal y no lo sabías.
Si te duelen las muertes de soldados y guerrilleros, si crees que esas muertes han debido evitarse, eres liberal y no lo sabías.
Si amas a los niños y consideras con la Constitución Nacional que sus derechos son más importantes que los derechos de todos los demás, eres liberal y no lo sabías.
Si te mortificas cuando te enteras que somos uno de los países del mundo en donde hay más desigualdad, eres liberal y no lo sabías.
Si eres partidario de una reforma integral en el campo que tenga en cuenta a los campesinos y a sus familias, eres liberal y no lo sabías.
Si piensas que no debe concentrarse la riqueza en unas pocas personas y empresas y que debe existir una mejor distribución de los ingresos, eres liberal y no lo sabías.
El Partido Liberal adelanta una importante actividad para actualizarse y renovarse. Se ha abierto a la mujer y a la juventud. Quiere volver a encarnar la equidad y el bienestar.
El Partido ha definido con sus candidatas y candidatos que quienes sean electos deben atender prioritariamente los siguientes 5 puntos: ayudar a la paz, defender el medio ambiente, luchar por la descentralización y la autonomía de las Entidades Territoriales, obrar con la mayor rectitud y honradez, y propiciar la igualdad en todos los aspectos.
Para el domingo aspiramos a que mucha gente vote liberal. Tenemos las mejores candidaturas, personas serias, con buenos antecedentes, decentes, competentes. Todas comprometidas con las mejores causas, muy definidas por hacer las cosas bien, por rendir cuentas, por respetar a las comunidades. Vale la pena apoyarlas.
Aspiramos a ser la primera fuerza política de Colombia. Con paz, en democracia, en un ambiente donde primen las oportunidades para todas y todos, convencidos de que es posible mejorar, teniendo a la educación como baluarte del cambio, el liberalismo se apresta a llegar al poder político en el 2018.
Hacen falta los gobiernos liberales. Se requiere una nueva República liberal en la que no haya discriminaciones y en la que los colombianos, conviviendo, practiquemos el memorable dictado de Juárez: “El respeto al derecho ajeno, es la paz”.