AUTOSUGESTIÓN

POR IGNACIO ORREGO ROJO MOTIVACIÓN PARA TODOS LOS DÍAS -La autosugestión es un término que se aplica a todas las sugestiones y estímulos que se administra uno mismo y llegan a la mente a través de los cinco sentidos. Dicho de otra forma la autosugestión es sugestión a sí mismo. Es la agencia de comunicación entre aquella parte de la mente donde tiene lugar el pensamiento consciente y aquella que sirve como lugar para la mente subconsciente. Para obtener resultados sorprendentes, procure que trabaje para usted la parte más profunda de su mente. -A través de los pensamientos dominantes que uno permite que permanezcan en la mente consciente, el principio de la autosugestión voluntariamente alcanza la mente subconsciente y la influencia con estos pensamientos. La autosugestión es el medio del dominio mediante el cual un individuo puede alimentar, voluntariamente a su subconsciente con pensamientos de naturaleza creadora o por negligencia permite que los pensamientos de naturaleza destructora habiten en el basto sector de su mente. -La palabras pronunciadas por los buenos sin la menor emoción no llegan al subconsciente. No obtendrá usted resultados apreciables hasta que aprenda a llegar a su subconsciente con pensamientos o palabras que hayan sido teñidos con la emoción y la total creencia. Su habilidad para usar el principio de autosugestión depende en gran parte de su capacidad de concentrarse sobre un deseo dado, hasta que tal deseo se convierta en una ardiente obsesión.  

La prepotencia, mal de muchos

*Marta Saenz Correa Hoy, estas cortas líneas van dirigidas a la prepotencia, característica que hace que las personas impongan su poder o autoridad sobre otros sujetos para sacar provecho u ostentarlo. Suele  asociarse a la soberbia y a la arrogancia. El sujeto prepotente tiene una excesiva valoración de sí mismo; en otras palabras, se siente superior a los demás. Convencido de que el resto de la gente debe someterse a su voluntad, no duda en tratar de imponerse sobre los demás. Su autoritarismo exagerado los hace irrespetar el orden establecido con tal de satisfacer sus vanidades personales. Tienen su ego hipertrofiado y solo viven para satisfacer sus deseos, sin permitir que nadie lo cuestione. Están permanentemente en guardia para reaccionar. Los prepotentes los caracteriza un exagerado amor propio, una inmensa susceptibilidad, y una sensibilidad excesiva que se manifiesta cuando enfrentan cualquier contrariedad. Siempre se refieren en exceso de alabanzas cuando hablan de sí mismo o de lo que hacen, como si nadie más lo hubiera hecho tan bien como lo hicieron ellos. Superficialmente aparentan ser amigables y bien ajustados a la sociedad, siempre y cuando no exista algo que contradiga a sus intereses. Desde pequeños muestran una falta de respeto hacia las reglas sociales establecidas, y tienen escasa tolerancia a la frustración. Su conducta se encamina a la satisfacción inmediata de sus impulsos egoístas, sin consideración de las consecuencias que esto genere a sus semejantes. El problema de los prepotentes está en su interior, porque sus miedos e inseguridades hacen que necesiten manejarlo todo y a todos. Aunque no lo parezca, su autoestima es tan o más baja que la de una persona sumisa. Simplemente, donde unos se dejan pisar por los demás porque se sienten inferiores, los otros necesitan ir pisando para sentirse superiores. Suelen ser personas muy críticas con los demás, pero también consigo mismas. Quieren tener siempre la razón y se ponen agresivas si alguien les lleva la contraria. Ahora bien, dejar el viejo hábito de la prepotencia no es tarea fácil. Lo primero, es pensar en las cosas que te hacen comportar como si fueras superior a los demás; lo segundo, dejar de asumir que sabes más que los demás. Lo tercero, se compasivo, mira a los demás por todas sus luchas, triunfos, logros, dudas, fragilidad y fuerzas, con lo que verdaderamente están hechos; lo cuarto, se asertivo, no agresivo, y por último, prueba con algo nuevo. Haz algo que requiera que confíes en el conocimiento y las habilidades de alguien más. Permítete confiar en ellos, y mantén abiertos tus oídos y tu mente. Aprender es un proceso de humildad, y al ser humilde, es posible desaprender a ser prepotente. Si se te acerca una de estas personas, te invito a que, antes de juzgarle te des cuenta de que ese enfado con el mundo en realidad esconde un enfado mucho mayor consigo mismo. Haz un esfuerzo ver a la persona que se esconde detrás, por comprender lo que necesita y lo que le llevó a ponerse esa mascara para protegerse del mundo.

Campaña política y corrupción

Horacio Serpa La semana pasada fue la campaña de la Vicepresidencia de la República, especialmente referida al doctor Germán Vargas Lleras, hasta ahora uno de las pocos candidatos presidenciales que se conocen. Las especulaciones periodísticas terminaron cuando todos los eventuales agraciados mantuvieron silencio y el actual Vicepresidente dijo que nunca se la había ofrecido a nadie. De ahora en adelante la atención se concentrará en las candidaturas presidenciales. Los liberales esperamos el Congreso del Partido; la U. tampoco ha tomado definiciones; de los Verdes se conoce la precandidatura de la doctora Claudia López; el Polo Democrático Alternativo ya se decidió por el doctor Jorge Enrique Robledo; Centro Democrático sigue con Zuluaga, Trujillo y Duque; se espera una candidatura independiente de la Ministra Clara López; también hay la expectativa del doctor Sergio Fajardo; el Partido Conservador tiene valiosos aspirantes pero muchos de sus dirigentes comentan que aún es temprano; otros Partidos como Opción Ciudadana, AICO, ASI. MAIS, tramitan distintas aspiraciones. El País sigue pendiente de novedades. Los temas de las campañas y las propuestas de las diferentes candidaturas estarán los siguientes meses en el orden del día. La Paz y las impugnaciones a la Paz estarán presentes; yo sigo insistiendo en que con las distintas colectividades Políticas elaboremos un programa mínimo de Salud que entrañe un modelo diferente y se vuelva propuesta general; la lucha contra la corrupción será un tema importantísimo, de gran valor para todas y todos los colombianos. Son muchos los casos de corrupción en el sector público, en todas partes y de todos los tamaños. ¡Los latrocinios se volvieron gigantes! Solo con mencionar lo del Distrito y los Nule, el enorme atropello de Reficar y lo que actualmente gira alrededor del nombre de Odebrech, tenemos un enorme escándalo que hiere profundamente a todos los colombianos y les causa gran indignación. La lucha contra la corrupción, contra los funcionarios venales, contra los actos oficiales ilícitos e indecorosos, contra toda clase de chanchullos y mordidas, lo mismo que contra quienes en el sector privado estafan, engañan y propician la corrupción de los servidores públicos, serán objeto de detallado debate en las elecciones que se aproximan, para integrar el nuevo Congreso Nacional y para elegir Presidencia de la República. El Partido Liberal cumplirá bien, con decisión y severidad, la tarea que le corresponde por la transparencia en la gestión pública. Nadie puede esperar solidaridad del Partido frente a la ejecución  de actos delincuenciales o de tramoyas para desfalcar el erario público, ni nadie podrá escudarse en el Partido para cometer atropellos contra los recursos ni el patrimonio de la Nación o de las Entidades Territoriales. La lucha contra la corrupción compromete a todas y todos los liberales de Colombia El Partido Liberal, fiel a sus principios éticos y deberes ciudadanos, respalda sin condiciones la importante labor que por la transparencia, el cumplimiento de la ley y contra la corrupción, cumplen el Contralor General de la República, el Fiscal General del País y el Procurador General de la Nación.