La Intolerancia principal enemigo de la Paz

Por: Germán Archila @Germancho101 En días pasados el exguerrillero Jesús Santrich decidió llamar a cretino a un periodista que se atrevió a preguntarle por los testimonios de algunas excombatientes que aseguran haber sido violadas y obligadas a abortar durante su estadía con las FARC, relatos escalofriantes sobre la manera como se comportaban diferentes mandos de los frentes guerrilleros. Estar atravesando un proceso de paz, y que la guerrilla más antigua del continente decidiera  desmovilizarse es un choque muy fuerte para la sociedad civil, independientemente de las mentiras de uno y otro lado  que se dijeron durante el referéndum, ganó el NO, y por estadísticas en muchos municipios azotados por las FARC sus ciudadanos decidieron no apoyar el proceso, claro está que el plebiscito fue un capricho de Juan Manuel Santos para avalar con los colombianos un proceso que dejaba muchas dudas, cuando pudo utilizar otros métodos para ejecutar el acuerdo, tal como se hizo luego de la derrota en las urnas. Es un sapo que nos tenemos que tragar los ciudadanos, viendo a los guerrilleros andar libres, sin haber pagado 1 día de cárcel por los crímenes cometidos, pero en virtud de la paz y del progreso es algo que la sociedad tendrá que aceptar, que lo acepte no signifique que lo olvide, ni tampoco se puede obligar a las miles de victima que los perdonen, eso es un proceso individual. Pero los Timochenko, Iván Márquez, Santrich, Romaña entre otros,  deben entender que ya no están en el monte, que no pueden coartar ni descalificar a las personas, y que deben aceptar las críticas de la sociedad por los hechos en que incurrieron, cada vez que un ex integrante de las FARC tienen una salida en falso como esta públicamente, nace el debate si están dispuestos a vivir en democracia, tienen que tener en cuenta que estarán en el congreso de la república y que pasaron de prófugos a personajes públicos, lo que implica una constante fiscalización de sus hechos no solo actuales, sino pasados. El principal enemigo de este momento histórico que vive el país, es la intolerancia, no aceptar la crítica de los demás, y utilizar calificativos de alto calibre contra los contendientes, hemos visto las veces que la justicia ha dado la orden a la senadora Claudia López que se rectifique de acusaciones que ha hecho contra diferentes personas, se debe entender que cada palabra que salga de la boca de un líder político debe estar sustentada con pruebas y argumentos. No podemos caer en utilizar el congreso y la política como un ring de populismo y gritos, al mejor estilo de Moreno de Caro y sus actuaciones chovinistas de otrora época, la paz y la reconciliación no solo se encuentra dejando las armas, si no también bajándole al tono, teniendo debates y confrontando ideas con altura. Ese es el verdadero camino hacia la reconciliación y a tener un país mejor.

APERTURA ELECTORAL

A pesar de que oficialmente aún no ha empezado la campaña electoral de 2018, lo cierto es que ya se han dado los primeros pasos para su inminente realización. Y lo primero que se observa es la adopción por parte de todos los partidos y movimientos de una estrategia de apertura electoral dirigida, esto es, la adopción de una actividad política con identidad propia pero abierta al llamado y la consiguiente recepción  de otras actividades políticas, que, además de considerarse afines o armónicas, también persiguen constituir una fuerza política con alternativas de alcanzar algunos manifestaciones del poder político. Sin embargo, la misma naturaleza de la actividad política, hoy día de carácter protagónico y de ejercicio personalista y, en algunos casos, hasta caudillista, han dificultado dicha apertura, tal como lo comienzan a demostrar la primera etapa de las inscripciones de las listas a corporaciones públicas. Ello explica que todos los partidos y movimientos,  incluyendo al mismo partido del  Centro Democrático, hayan adoptado el aún vigente sistema electoral del voto preferente, como instrumento para promover una mayor apertura no solo de nuevos candidatos, nuevas empresas electorales, nuevas organizaciones y nuevas ideas electorales, sino también para ampliar  las posibilidades de nuevos  liderazgos regionales, que faciliten una mayor votación y una mayor participación en las corporaciones públicas, que, a su vez fortalezcan e impulsen una posterior candidatura presidencial. Luego, no se trata de un desdibujamiento de la actividad partidaria, la cual sigue manteniéndose esencialmente intacta, sino, que sencillamente se trata de una simple estrategia de apertura electoral con fines estrictamente electorales, ajenos al beneficio de la sociedad colombiana.