Por: Marta Sáenz Correa
Continuaremos con la presentación de los aspectos más relevantes del libro: Las claves del pensamiento positivo, en el cual sus autores Napoleón Hill y Michael J. Ritt. Jr. nos enseñan como lograr que nuestros deseos y anhelos se hagan realidad, y a sacarle el mejor provecho a lo que tenemos. En la primera parte abordamos los pasos para lograr la actitud mental positiva (AMP), tales como hacerse cargo de tu propia mente con convicción, mantener ocupada tu mente en las cosas que deseas y lejos de las que no deseas, vivir la regla de oro, y eliminar todos los pensamientos negativos por medio de la autoinspección.
El paso siguiente: Se feliz y haz felices a otros. Para ser feliz, actúa feliz. Así como eres ágil para pensar tu camino hacia una nueva forma de proceder, también tienes la habilidad de proceder en tu camino hacia una nueva forma de pensar. Se entusiasta, compórtate entusiasmo. Sonríete a ti mismo y al mundo. La felicidad es tremendamente contagiosa y atractiva. Si haces el esfuerzo de ser feliz, la gente que te rodea será feliz.
Crea el hábito de la tolerancia, mantén una mente abierta hacia las personas. Trata de que la gente te agrade y acéptalos como son en lugar de exigir o desear que ellos sean como quieres que sean. Busca el bien en otros y aprende a disfrutar de la gente. La cortesia, por ejemplo, es el más barato de los placeres, no cuesta nada y trasmite mucho, complace al que la da y al que la recibe, y como la misericordia, es una doble bendición. Finalmente, asegúrate de no permitir que ideas intolerantes que has absorbido de otras
personas limiten tus propias ideas de lo que puedes lograr.
Hazte sugerencias que te ayuden a condicionar tu mente para que exprese una actitud mental positiva en todo momento. Por ejemplo, hacer afirmaciones como me siento bien de salud!, me siento muy feliz!, me siento excelente! nos permiten traducir en realidad física los pensamientos y actitudes que tenemos en la mente. Cuando nuestra actitud hacia nosotros mismos es grande y hacia otros generosa, atraemos grandes porciones de éxito hacia nosotros mismos.
Trázate metas, pues depende de ti el decidir qué quieres de la vida. Cuando te decides, tienes el poder para tomar el control de la mente y usarlo para alcanzar las metas propuestas. Con una buena actitud se pueden lograr cosas inimaginables mientras lo que te propones no viole la ley de Dios o los derechos de otros. Experimenta lo emocionante de saber que puedes lograr cualquier meta u objetivo que te propongas cumplir. Una actitud mental positiva combinada con propósitos concretos, la selección de una meta específica, es el punto de inicio para el éxito.
Estudia, piensa y planea a diario. Te debes a ti mismo el desarrollar y conservar una actitud mental positiva a fin de recibir de la vida todo lo que deseas. La clave para hacer que el tiempo que tomes para estudiar y planear valga la pena, está en retarte a ti mismo, en explorar nuevos mundos y filosofías, que arrojen una luz sobre tu situación u obstáculo a resolver. No olvides el poder de la actitud mental positiva es enorme y te lleva a donde quieras ir. A donde vayas las cosas no dependen completamente de ti, pero puedes trazar una meta y lograrla cambiando solo una cosa en tu vida: la actitud hacia todos y todo lo que encuentres en el camino de la vida.