El Dinero ayuda pero no lo es todo

*Marta Saenz Correa. En la vida, el dinero puede proporcionarte oportunidades de aprendizaje, pero nunca te ayudará en los procesos de reflexión personal y mejora. El aprendizaje proviene de un cambio al interior de nosotros no del dinero en efectivo en nuestra cuenta bancaria, o del saldo de nuestras tarjetas de crédito. El dinero ayuda en la vida, pero no lo es todo. Con él, puedes comprar cosas materiales, pagar doctores, alimentos, e incluso comprar el comportamiento de las personas, pero hay cosas que el dinero no se puede adquirir. Con billetes no se puede tener salud, felicidad, fe, paz, propósitos, alegría, amor, y mucho menos una familia. El dinero es una herramienta que todos necesitamos para proporcionar una buena vida para nuestras familias, que te ayudará a vivir un estilo de vida, pero no a crear la vida; no es el principio y final de la vida. En algún momento de nuestras vidas hemos pensado que ganarnos la lotería nos permitiría solucionar nuestros problemas y hacer nuestra existencia más feliz. Pero un estudio realizado por The University of British Columbia explica que la riqueza disminuye la sensación de tristeza, pero no aumenta la de bienestar. El estudio llegó a la conclusión de que contar con unos mayores ingresos no ayuda a ser más feliz a diario. El tener acceso a mayores ingresos está asociado a experimentar menos tristeza, pero no necesariamente a la felicidad. La felicidad se sustenta en falsas premisas, y el dinero es una de ellas, siendo quizá una de las más dañinas, ya que ni siquiera es parte de una experiencia placentera como lo es el comer. El dinero no da la felicidad porque es un medio y no un fin. El primer factor que influye en tu felicidad eres tú mismo, tu actitud frente a la vida, como reaccionas con lo que pasa y con lo que te pasa. Un segundo factor es el entorno social, que se construye a partir de nuestras relaciones con los demás. El tercer factor es vivir en una democracia, pues vivir con garantías individuales y colectivas aseguradas en una u otra medida, hace que seas más o menos feliz. El cuarto factor es la salud, ya que si tus motivaciones y reacciones son constructivas y estas rodeado de tus seres queridos, un quebranto de salud es llevadero. Y el quinto factor es una mezcla variable del país en el que vives, la religión que prácticas, tu profesión o la cantidad de dinero que tengas. En conclusión, aun cuando el dinero ayuda no te da felicidad; son las personas que te rodean.   Las mejores cosas en la vida son gratis: amar, abrazar, sonreír, besar, dormir, reír, tener buenos recuerdos, ayudar a los demás, cultivar las relaciones sociales, tener tiempo para nosotros mismos, y contar con familia y amigos

El Dinero ayuda pero no lo es todo

*Marta Saenz Correa. En la vida, el dinero puede proporcionarte oportunidades de aprendizaje, pero nunca te ayudará en los procesos de reflexión personal y mejora. El aprendizaje proviene de un cambio al interior de nosotros no del dinero en efectivo en nuestra cuenta bancaria, o del saldo de nuestras tarjetas de crédito. El dinero ayuda en la vida, pero no lo es todo. Con él, puedes comprar cosas materiales, pagar doctores, alimentos, e incluso comprar el comportamiento de las personas, pero hay cosas que el dinero no se puede adquirir. Con billetes no se puede tener salud, felicidad, fe, paz, propósitos, alegría, amor, y mucho menos una familia. El dinero es una herramienta que todos necesitamos para proporcionar una buena vida para nuestras familias, que te ayudará a vivir un estilo de vida, pero no a crear la vida; no es el principio y final de la vida. En algún momento de nuestras vidas hemos pensado que ganarnos la lotería nos permitiría solucionar nuestros problemas y hacer nuestra existencia más feliz. Pero un estudio realizado por The University of British Columbia explica que la riqueza disminuye la sensación de tristeza, pero no aumenta la de bienestar. El estudio llegó a la conclusión de que contar con unos mayores ingresos no ayuda a ser más feliz a diario. El tener acceso a mayores ingresos está asociado a experimentar menos tristeza, pero no necesariamente a la felicidad. La felicidad se sustenta en falsas premisas, y el dinero es una de ellas, siendo quizá una de las más dañinas, ya que ni siquiera es parte de una experiencia placentera como lo es el comer. El dinero no da la felicidad porque es un medio y no un fin. El primer factor que influye en tu felicidad eres tú mismo, tu actitud frente a la vida, como reaccionas con lo que pasa y con lo que te pasa. Un segundo factor es el entorno social, que se construye a partir de nuestras relaciones con los demás. El tercer factor es vivir en una democracia, pues vivir con garantías individuales y colectivas aseguradas en una u otra medida, hace que seas más o menos feliz. El cuarto factor es la salud, ya que si tus motivaciones y reacciones son constructivas y estas rodeado de tus seres queridos, un quebranto de salud es llevadero. Y el quinto factor es una mezcla variable del país en el que vives, la religión que prácticas, tu profesión o la cantidad de dinero que tengas. En conclusión, aun cuando el dinero ayuda no te da felicidad; son las personas que te rodean. Las mejores cosas en la vida son gratis: amar, abrazar, sonreír, besar, dormir, reír, tener buenos recuerdos, ayudar a los demás, cultivar las relaciones sociales, tener tiempo para nosotros mismos, y contar con familia y amigos

CONFIANZA Y SEGURIDAD

POR IGNACIO ORREGO ROJO MOTIVACIÓN PARA TODOS LOS DIAS -Tenga respeto por sí mismo. Tiene derecho a estar aquí y tiene algo que cumplir. No se esconda en su propia sombra; haga a un lado su pequeño yo para que el yo grande pueda salir adelante. Saque de sí el máximo provecho avivando la diminuta chispa de la posibilidad que lleva dentro hasta que sea una llama de éxito. Forme en usted mismo el ser con quien pueda vivir gozoso el resto de su vida. -La confianza y la seguridad nacen del conocimiento. La gente siente temor ante lo desconocido. Procure adquirir el máximo conocimiento en lo que usted trabaja, esto lo  hará triunfar indudablemente porque le dará confianza y seguridad en usted y en lo que hace. -La autoconfianza está estrechamente ligada con la fe y la creencia en nosotros mismos y en nuestra propia capacidad. Los hermanos Wright son un ejemplo excelente de esta fe. El mundo se negó a creer en que ellos podrían construir una máquina capaz de volar, pero ellos e negaron a desanimarse por las opiniones de la gente. Tenían fe en sí mismos y convicción en lo que hacían. Si queremos triunfar tenemos que desarrollar autoconfianza para que nos haga alcanzar el éxito y la felicidad. -La autoconfianza es una expresión de nuestra opinión acerca de nosotros mismos y sólo podemos limitarnos mediante nuestros propios pensamientos negativos. La falta de autoconfianza es un hábito creado por la costumbre de pensar en forma negativa y descuidada. No les haga caso a los que dicen que usted no puede, demuéstreles que sí puede porque tiene confianza y seguridad en sí mismo.