Por: Germán Archila
@Germancho101
Llevamos 90 días desde que Enrique Peñalosa asumió las riendas de la ciudad de Bogotá, fiel a sus principios, nombró en los diferentes puestos del gabinete a personas técnicas y que tienen buen recorrido en su campo de acción, la popularidad del burgomaestre está en los mismos porcentajes que el de la administración Petro.
Fuera de ver movimientos que en mi parecer son necesarias como la recuperación del espacio público y limpiar la ciudad visualmente, en los temas más profundos no se ven acciones para restaurar los 8 años en que la ciudad fue manejada entre la corrupción de Samuel Moreno, y la prepotencia e improvisación del anterior alcalde.
Me sorprendió un titular de una entrevista dada al diario El Espectador la gerente de Transmilenio Alexandra Rojas, donde afirma que el sistema necesita 12 años para ser eficiente, que están pensando en prorrogar los contratos de los buses de la Fase 1, pero donde están las soluciones para los usuarios, que día a día ven como el sistema sigue en el ostracismo y sin ninguna solución inmediata.
¿Dónde están los planes de choque? Las campañas para que el sistema vuelva a tener sentido de pertenencia, por parte de los ciudadanos de la Capital, el mejoramiento de las frecuencias de los buses, arreglo de puertas y estaciones, si se aumentó la tarifa, lo mínimo que espera el usuario son mejoras a lo que vive, ya basta de echar el espejo retrovisor, sabemos que muchas de las cosas que suceden fueron culpa de la improvisación de Petro, para la muestra la implementación del SITP, pero los electores lo escogieron a usted ENRIQUE PEÑALOSA no para diagnosticar las causas de los problemas, si no intentar solucionarlos desde el primer día.
El tema principal de la ciudad no puede estar vinculado a un capricho con la reserva Van Der Hammen, que al fin de al cabo es una pelea con ambientalistas y que la decisión final la debe dar la CAR y las autoridades expertas en el tema, no es posible que el Secretario de Planeación tenga una propiedad de 2.000 metros cuadrados, y menos en el funcionario que está impulsando la propuesta, la mujer del cesar no solo debe ser honesta, si no parecerla, y esto se llama conflicto de intereses, ahora Alcalde una de las críticas más frecuentes a la administración anterior eran sus salidas en falso en Twitter como decir que “El Liceo Francés era un colegio público” y lamentablemente este trino demuestra la misma metodología:
Cualquier decisión de un empleado público debe revisarse de acuerdo a sus intereses personales y lo mínimo es que Andres Ortiz no tenga injerencia en ningún plan con la reserva, Señor Alcalde por defender sus ideas no salga con salidas fuera de tono- Peñalosadas.
Todavía quedan 3 años y nueves meses para que cambie el rumbo de la ciudad, lo único importante es que las cosas no se miden como comienzan sino como terminan. A DESPERTAR SEÑOR ALCALDE.
